No trato de
impresionar ni de hacerme el célebre, pero en el momento estoy viviendo
una experiencia que anteriormente no la había sentido, es algo como mágico,
porque siento que comienzan a caer por pedazos creencias construidas y lo que seduce de éste estado es la paz que siento. La sensación es como si el parabrisas
opaco, ahora dejara ver con más claridad la luz
que hay alrededor sin aferrarme a nada. En mis reflexiones me digo que "son cosas de la
edad", porque ya son 55 años y en ésta etapa creo que se dejan de perseguir
muchas cosas; la vida se desacelera. Y siento ese desacelere porque de pronto deja interesarme el tener la razón o el perseguir y tener cosas materiales.